Naciones Unidas, 6 feb (Prensa Latina) El secretario general de la ONU, António Guterres, llamó hoy a unir esfuerzos para eliminar al llegar al 2030 la mutilación genital femenina, una práctica horrible y dañina.
En un mensaje por el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, recordó que más de 200 millones de niñas y mujeres que están vivas hoy han sufrido esa práctica.
Mientras las Naciones Unidas se embarcan en una Década de Acción para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (Agenda 2030), hagamos de ésta la década de la mutilación genital femenina cero, recalcó.
Tal práctica es una manifestación flagrante de la desigualdad de género que está profundamente arraigada en las estructuras sociales, económicas y políticas, señaló el secretario general.
Asimismo, añadió, es una violación de los derechos humanos y una forma extrema de violencia contra las niñas.
Según Guterres de 2000 a 2018 la prevalencia de esa práctica disminuyó en un 25 por ciento, pero este año más de cuatro millones de niñas están en riesgo.
Este Día Internacional de la Cero Tolerancia con la Mutilación Genital Femenina destaca el poder de los jóvenes para hacer oír su voz: debemos amplificar esas voces y ayudarlas a abogar por el cambio y por sus derechos, convocó Guterres.
«Juntos, podemos eliminar la mutilación genital femenina para 2030. Hacerlo tendrá un efecto positivo en la salud, la educación y el avance económico de las niñas y las mujeres», planteó
Un reciente estudio de Unicef indicó que alrededor de una de cada cuatro niñas y mujeres víctimas de la mutilación genital femenina (52 millones en todo el mundo) la sufrieron por parte del personal sanitario.
De acuerdo con esa investigación, la mutilación genital femenina en centros sanitarios, en el hogar o en otro lugar es extremadamente común en Egipto y Sudán, donde casi ocho de cada 10 niñas fueron víctimas de esta mutilación por el personal médico.
En tanto, la Organización Mundial de la Salud apuntó que, de atenderse todas las necesidades médicas derivadas de la mutilación genital femenina, los costos sanitarios de su tratamiento ascenderían a mil 400 millones de dólares anuales en todo el mundo.